CUANDO NO PUEDAS CAMBIAR TU SITUACIÓN, CÁMBIATE A TÍ.
CUANDO NO PUEDAS CAMBIAR TU SITUACIÓN, CÁMBIATE A TÍ.
Telita con la frase...
Estoy segura que muchas veces te has encontrado en una situación difícil y complicada que escapa a tu control, y te has sentido super frustrada.
En la psicología positiva siempre se dice que si algo no te gusta, lo cambies, que te muevas, que digas que no...y un sinfín de cosas que, en algunas ocasiones, sí está en nuestra mano cambiar las situaciones externas, pero en otras, no podemos hacer nada para cambiarlas. Es en ese momento donde se nos presenta el reto de cambiarnos a nosotras mismas.
¿Y qué quiere decir esto? Pues que podemos cambiar la forma con la que lo afrontamos. Que podemos cambiar la forma con la que reaccionamos. Que podemos tomar el control de nuestro interior y de nuestras emociones.
Te voy a poner un ejemplo fácil. Pongamos que tu madre es de esas mamis pesadas, que siempre se está quejando, que se hace la víctima. ¿Qué vas a hacer? ¡No la puedes cambiar por otra!! No vas a dejar de hablarle sólo porque siempre se queja. ¿Vas a estar discutiendo con ella siempre para que cambie, cuando ella no ve que tenga que cambiar? Pues no, claro que no.
¿Y qué pasa cuando sales de su casa? Te sientes agotada, cansada, estresada...pues ahí es donde puedes cambiarte a ti.
APRENDE A MIRAR CON OTROS OJOS
Puedes empezar por cambiar la forma de mirarla y de escucharla. Puedes intentar empatizar un poco más con ella. Una persona muy sabia me dijo una vez que escuchar a alguien quejarse es como sostenerle el abrigo. Verdad que si alguien te dice ¿me sostienes el abrigo por favor, se lo vas a sostener? Y después se lo vas a devolver. Pues con la queja pasa lo mismo. Escucha y cuando termine de hablar, suelta, suelta esa queja que no es tuya para que no te intoxique. Suelta para que no te quedes tú con su basura mental.
Otra situación que hemos vivido últimamente que nos ha invitado al cambio interior es la pandemia. Había una situación extrema fuera, en nuestro mundo exterior, algo que no podíamos cambiar y que no dependía de nosotros. ¿Qué soluciones teníamos? Sólo podíamos aceptar el momento que vivíamos y decidir vivirlo lo mejor posible. No fue nada fácil para la mayoría de familias.
ACEPTACIÓN
La clave para el cambio desde adentro es la aceptación. Cuando aceptas por completo la situación eres capaz de cambiar el enfoque, la actitud y la forma de afrontarla. Y cuando eso ocurre se produce la magia.
De repente se vuelve más fácil estar con las personas con las que antes te costaba relacionarte. De repente no te importa si llueve o si hace sol, porque sea como sea el tiempo te vas a adaptar a él.
Y no te confundas que no hablo de resignación. Hablo de aceptación y poder. Hablo de decidir ser y estar presente en cada momento para ver lo bueno de cada instante y de cada situación.
¿Qué crees que va a pasar si el próximo día que visitas a tu madre vas con otra actitud, con una sonrisa, sin discutir, sin enfrentarte a ella? Pues seguro que ella va a notar ese cambio de actitud en ti y seguramente se sienta más relajada, más confiada y de mejor humor para hablar de otros temas. Seguramente con los días verás que disminuye la queja y que esos ratitos vuestros se vuelven mejores momentos. ¡Incluso puede ser que quieras ir más a menudo a verla!!!!
Te reto a que lo pruebes, total ¿Qué tienes que perder??? Piensa en una situación cotidiana que te sea difícil de sobrellevar y reflexiona de qué manera puedes cambiar tú el enfoque de esa situación.
Claro que no será fácil, pero puedes hacerlo divertido, como si fuera un juego. Diviértete cambiando la forma de ver el mundo, tu entorno y estoy segura que verás que tu vida es mucho más rica, plena y bonita de lo que crees.
Te deseo Comer divirtiéndote, Reír con tus situaciones y Amar todo tu mundo.
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